Evita prescindir de lo esencial, ¡Sentirte vivo!
Evita prescindir de vivir momentos, momentos de pequeña locura, momentos de freno moderado.
Evita que pase el tiempo sin más, ese tiempo que traerá nostalgia de lo no vivido y recuerdos en forma de sonrisa dulce por aquello que un día saboreaste.
Evita evitar a tu corazón, será tu mejor guía cuando te encuentres ante decisiones difíciles, en momentos oscuros evita evitar a tu corazón.
Evita que te invada la soberbia, aunque te llene, es mala compañera de viaje, traicionera y celosa de buenos amigos.
Evita olvidar que no se puede perder lo que nunca se tuvo, no se puede mantener lo que no es tuyo y no puedes aferrarte a algo que no quieres.
Evita estridencias y excesos de vida rápida. Saborea y recuerda que esfuerzo simple crea felicidad suave.
Evita rechazar a personas, a esas personas de buena conciencia, sabio perdón y mejor memoria para no olvidar. A estas personas evita evitarlas, evita perderlas.
Y ante todo evita evitar, lucha o huye, nuca te pares. Si, huye, no seas cobarde, pero si lo inteligente es huir, huye…de personas con espinas y esquinas huye, de vampiros de tiempo huye…de tu infelicidad huye!
Hace tiempo escribí que la felicidad acude sin avisar cual susurro de fantasma…Hoy pienso que la felicidad como cualquier otra cosa en esta vida tendrás que pelearla, la felicidad tendrás que buscarla y ganártela, porque de lo que nunca deberás prescindir será de vivir, vivir tu FELICIDAD.